¡Empezó la época del recalentado! Y de una cuesta financiera que reta las finanzas de cualquiera. Por algo enero es el mes más largo del año. Tras el fervor navideño, suele surgir una sensación de incertidumbre por el futuro. Pero enero no solo es sinónimo de dudas, también implica gastos extraordinarios, reajustes en la economía y la vuelta a la rutina. Te entendemos perfectamente: ¡lo hemos vivido! Por eso este artículo te ayudará a escalar esta cuesta financiera sin necesidad de tanque de oxígeno.
¿Qué es la cuesta de enero? Una expedición desafiante
La cuesta de enero es un fenómeno que surge en la economía producto de las fiestas de diciembre. Entonces, enero conlleva un escenario lleno de nuevas deudas, gastos y múltiples reajustes que pueden desbaratar tus finanzas si no te pones pilas. ¡Aprende a llevarla suave, sin caer en ningún acantilado de gastos!
4 consejos para superar la cuesta del mes de enero
1. Aplica un ayuno financiero
Pocos momentos son mejores para un ayuno financiero que cuando empieza un nuevo año. Y es que ya sabemos que diciembre está marcado por facturas mucho más gordas que el pavo del 24. Así que veamos cómo aplicarlo.
Así como cuando haces dieta te propones comer menos, así el reto de 21 días de ayuno financiero te sugiere gastar solo en lo esencial. Su creadora, Michelle Singletary, destacada periodista y columnista norteamericana, sugiere este método como una forma de recuperar una economía personal desgastada. ¿Ves? Ideal para hacerlo en enero (y en cualquier otro momento en que sientas que tus finanzas ya no dan más).
5 pasos para aplicar el ayuno financiero
- Elige el día de enero en que quieres empezar: decídete y hazlo por 21 días.
- Gasta solo y exclusivamente en cubrir necesidades: no hagas ningún gasto innecesario, ni siquiera gastos hormiga. Suena estricto pero es por tu bien y por poco tiempo. ¡Confiamos en ti y en que podrás hacerlo!
- Paga con tarjeta de débito: la idea es que no asumas nuevas deudas con tu tarjeta de crédito, por ahora, y que cubras las necesidades con tus ingresos.
- Mantén un pequeño diario de gastos: para que sea mucho más fácil, lleva este registro en tu app Kamina, desde la sección “Mi dinero”. (Descárgala, que está disponible gratis por tiempo limitado)
- ¿Caíste ante las tentaciones?: si incurriste en gastos no necesarios dentro de los 21 días, entonces es hora de empezar de cero.
Este desafío te permitirá retomar el control de tus finanzas después de los consumos de diciembre. Al analizar tus gastos y priorizar lo esencial, no solo evitarás gastar impulsivamente, sino que también descubrirás que ahorrar es más sencillo de lo que imaginabas.
¿Te atreves?
2. Toma en cuenta los reajustes en la economía
En enero suelen pasar varias cosas en la economía que podrían impactar también a tus finanzas personales. Veamos:
- Se ajusta el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y, por ende, la inflación.
¿Qué quiere decir? Básicamente, cuánto suben o bajan los precios de todas las cosas que compras en el día a día, incluída, obviamente, la canasta básica. ¡Ves por qué necesitas prestarle atención!
Cuando escuches que la inflación subió entonces es hora de hacer ajustes en tu presupuesto y en tu forma de gastar para que el dinero te siga rindiendo, sobre todo si tus ingresos se mantienen iguales.
Si, por el contrario, escuchas que la inflación es menor, es probable que el dinero rinda más y eso significa que podrías ahorrar más o abonar más a tus deudas actuales.
- Se reajustan las tasas de los productos crediticios.
En enero, algunos tipos de créditos sufren un reajuste, respetando el techo que impone la entidad regulatoria, es decir, la Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera.
Este reajuste podría provocar una subida o bajada del monto de tus cuotas, lo que te obliga a recalcular tus finanzas para seguir siendo un buen pagador. O sea en otras palabras, para que no te pases al club de la morosidad. Consulta con tu entidad financiera sobre tu tasa vigente y el techo máximo.
Extra tip
Recuerda que los créditos informales se encuentran fuera del margen de toda ley y regulación y que los intereses suelen ser desproporcionadamente altos. Este año, procura no caer en deudas así.
3. Actualiza tu presupuesto… o crea uno
Ante tantos ajustes, gastos y deudas, lo recomendable es que mantengas tu presupuesto actualizado desde enero. ¿No tienes uno? Es hora de hacerlo y de comenzar el hábito de consultarlo y ajustarlo dependiendo de tu situación y retos que surjan a lo largo del año. Usa una agenda o una hoja de excel para hacer tu presupuesto:
- Registra los ingresos familiares fijos y variables y suma el total.
- Ingresa también cada uno de los gastos de casa por categorías: hogar (servicios básicos), salud, alimentación, transporte, restaurante, vestimenta, educación, entretenimiento, deudas y otros. Busca tus pagos y facturas en los canales digitales de tu banco, estados de cuenta, etc. ¡No olvides sumar el total!
- Considera también cualquier gasto variable o extraordinario que pueda surgir y apunta las fechas: matriculación vehicular, impuesto predial, declaraciones de impuestos (si las haces).
- Infla un poco o redondea cada monto para cubrir esas variabilidades que puedan surgir mes a mes. Por ejemplo, los servicios básicos nunca suelen ser del mismo monto.
- Añade un monto para empezar a ahorrar. ¡Sí, es el momento!
Extra tip
Tus ingresos siempre deberían ser mayores a los gastos. Si no está ocurriendo esto, necesitas encontrar esos patrones de gasto que te están perjudicando.
4. Registra tu progreso y gastos diarios durante el ayuno y crea hábito
¿Quieres saber si tu dinero está haciendo dieta contigo? ¡La clave está en espiar tus gastos! Con Kamina, por ejemplo, podrás registrar cada centavo que se te va y descubrir dónde se esconden esos gastos que tanto impactan a tus finanzas personales.
Estos son algunos de los beneficios que obtienes cuando llevas un control de gastos:
- Claridad y control: al llevar un registro detallado de tus ingresos y egresos, obtienes una visión clara de dónde se va tu dinero. Esto te permite identificar áreas donde puedes recortar gastos y tomar decisiones más conscientes.
- Reducción de la ansiedad: saber exactamente en qué estás gastando te ayuda a evitar sorpresas desagradables a final de mes. Al tener un control sobre tus finanzas, reduces la incertidumbre y la preocupación.
- Objetivos claros: con un registro de tus gastos, puedes establecer metas financieras realistas y realizar un seguimiento de tu progreso. Esto te motiva a seguir adelante y te da un sentido de logro.
- Hábitos de ahorro: al identificar áreas donde puedes reducir gastos, tienes más posibilidades de ahorrar para tus metas a largo plazo, como comprar una casa o viajar.
- Preparación para imprevistos: un registro de tus gastos te ayuda a identificar patrones de gastos y a crear un fondo de emergencia para hacer frente a situaciones inesperadas.
En resumen
La cuesta de enero es inevitable, pero cómo la enfrentes depende de ti. Con pequeños ajustes y las herramientas correctas, podrás construir una base sólida para todo el año. Recuerda que Kamina es esa herramienta al alcance de tu mano que te ayuda a alcanzar tus objetivos financieros.