Campana sobre campana 🔔… ¡Nosotros ya sentimos el cascabeleo y sabemos que tú también! Llegó la que para muchos es la mejor época del año: la Navidad. Para inicios de diciembre, tu espíritu navideño ya empieza a controlar tu cabeza y tu bolsillo. Si bien es una época mágica en la que lo más importante es compartir y disfrutar en familia, también es un momento en el que se tiende a gastar mucho más, por muchas razones.
Es por eso que, mientras los elfos trabajan duro en el Polo Norte, nosotros vamos a adelantarte uno de tus regalos: una guía sencilla pero muy útil para evitar las deudas y el sobreendeudamiento durante las fiestas navideñas.
¿Por qué necesitas esta guía?
- Vas a aprender a planificar y priorizar mejor tus gastos navideños.
- Sabrás cómo evitar endeudarte en cosas que no ameritan y, peor, sobreendeudarte.
- Gastarás de forma más responsable y consciente.
1. Define cuánto va a gastar Papá Noel
Este es el momento en que Papá Noel pone los pies en la tierra (o en la nieve) y decide cuánto va a costarle la Navidad este año. Y como no nos vamos a hacer los locos, sabemos que tú eres el Papá o Mamá Noel de casa, así que siéntate y haz números.
¿Cuánto podrías gastar sin asumir ni una sola deuda? ¿De dónde van a salir los fondos para cubrir todos los gastos navideños? ¿Qué necesitas cubrir… cena, regalos, etc?
Idealmente, deberías poder cubrir estos gastos con tu sueldo regular y/o una porción de tu décimo tercer sueldo. ¡Una porción, dijimos!
Revisa cuántos ingresos tienen en casa este mes, resta los gastos fijos, el ahorro, el pago y abono a deudas y lo que sobre es lo que podrías destinar a los gastos navideños.
2. Acorten la lista de regalos
Para los niños, escribir las cartas a Papá Noel con todos sus deseos, es una tradición hermosa y trae mucha expectativa. Sin embargo, no es la idea del consumismo lo que debe prevalecer en estas fechas, sino la unión familiar y sobre todo esos regalos que no cuestan nada.
Por eso, nuestro consejo para la familia es que trabajen en el mensaje de la unión familiar más que en los regalos. Pero como sabemos que estos nunca faltan, te dejamos algunas ideas:
- Enséñales a reconocer y priorizar sus necesidades y que pidan algo que les haga falta.
- Exploren juntos lo que más les gusta y haz que escoja algo para aprender.
- Despierten a su niño interior y permítele pedir algo que desee con todo su corazón.
La idea es que según el presupuesto disponible en casa, puedan elegir uno o varios regalos que realmente valgan la pena.
También puedes incentivarlos a pedir esos regalos que no cuestan nada pero que son muy valiosos:
- Abrazos.
- Besos.
- Unas palabras lindas.
- Una sonrisa.
- Y cualquier cosa que sientan que, genuinamente, hará mejor a sus vidas, por ejemplo: paciencia, tiempo de calidad, momentos familiares, etc.
3. Paga con tarjeta de débito
Si presupuestaste bien tus compras navideñas, entonces estarás muy cómodo pagando todo con la tarjeta de débito. Recuerda que esta es la que toma los fondos de tu cuenta principal y se debitan automáticamente con cada compra o pago que hagas.
Usar la tarjeta de débito es otra forma muy eficaz de evitar deudas durante las compras navideñas. Además, resulta mucho más ventajosa para tus finanzas y tu seguridad:
- Tus compras se registran automáticamente en tu estado de cuenta, lo que te permitirá monitorear, luego, los montos exactos que has gastado, en qué tiendas y para qué. Lleva esos gastos a tu app Kamina para ir monitoreando de forma más fácil.
- La tarjeta de débito es mil veces más cómoda de llevar que los fajos de dinero en la cartera.
- Puedes encontrar promociones y descuentos interesantes por pagar con esta tarjeta en lugar de la crédito o el efectivo. Pero ojo, porque también son armas de doble filo, ¡no te dejes llevar!
- Es mucho más seguro llevar la tarjeta de débito que el efectivo. Al llevar efectivo, en el ajetreo de las compras navideñas, un robo puede dejarte sin un centavo. Por el contrario, la tarjeta de débito brinda una capa extra de seguridad para tu dinero, ya que hay restricciones de retiros, seguros contra robos y fraudes y posibilidad de bloquearla con una sola llamada.
Extra tip
Antes de salir a hacer tus compras, guarda tu tarjeta de crédito en un cajón… ¡Solo por unas horas! Así evitarás la tentación de usarla.
4. Controla tu modo Navidad
Para los fans de la Navidad es más fácil activar en su cerebro y billetera la magia y generosidad desmedida y eso puede hacerles gastar mucho dinero, incluso llevarlos al sobreendeudamiento. Vamos, Papá Noel, no te vamos a dejar solo, ahora mismo te ayudaremos a reconocer esos elfos traviesos en tu cabeza que hacen que gastes demasiado.
- Ilusión de la abundancia: el décimo tercer sueldo, que llega como bono navideño, puede darte una sobrevalorada ilusión de abundancia. Cuando sientas un exceso de “me lo puedo permitir” es hora de parar. Tal vez sí puedas permitírselo pero también tal vez ese dinero podría tener un mejor destino que solo una compra impulsiva. Para combatirla pregúntate: ¿de verdad este dinero me sobra?
- Comparación social: la publicidad, el estilo de vida de tus círculos sociales y las redes sociales pueden hacer que te compares con otros y entonces viene el FOMO (miedo a perderte de algo). El miedo a quedarte atrás también te puede hacer gastar en cosas que no se alinean con tu estilo de vida, tus rutinas o tu situación financiera. Por ejemplo: llenar el closet de ropa deportiva cuando no has empezado a trabajar el hábito del ejercicio. ¡No necesitas cosas materiales para empezar nada!
- Presión social: “cómpratelo” “te lo mereces” “para eso trabajas” “todos vamos a..” Estas son algunas frases que podrías escuchar por estos días y que ejercen una gran presión sobre ti para que gastes en algo, aunque no sea lo más conveniente para tus finanzas personales. Cárgate de autocontrol y lleva tu “No” bien firme.
- Sesgo del presente: esta tendencia en tu cabeza (y en la de todos) hace que valores más las recompensas inmediatas, es decir, que vivas solo en el “hoy” sin preocuparte por el futuro inmediato y peor a mediano o largo plazo. Esto hace que con el dinero en mano te dirijas en modo zombie a comprar todo lo que estuviste deseando estos meses. Este sesgo activa las compras impulsivas. Ante la impulsividad, pregúntate si vale que trabajes tantas horas para comprar eso que estás a punto de comprar. Además, llevar tu lista de compras, previamente planificada, es un excelente escudo para evadir este comportamiento.
Consejo del experto
Si necesitas endeudarte en estas fiestas navideñas, que sea en algo que dure mucho más de lo que va a durar la deuda y que sea algo que necesites. Además, confirma que tus deudas actuales no superan el 30 o 40% de tus ingresos.
En resumen
Sabemos que los gastos en diciembre son muchos, pero Papá y Mamá Noel no tienen por qué endeudarse y menos sobreendeudarse en esta Navidad. Para ello, es necesario que organicen sus gastos, manejen las expectativas de su familia y sus círculos sociales, preparen un presupuesto, controlen los impulsos y disfruten de lo que realmente importa en estas fechas: la unión y el amor en familia.
